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Cuarentena

Es un periodo de aislamiento necesario para recuperar la salud, para reencontrarse con uno mismo, en un tiempo necesario para que los tejidos corporales se recuperen, para que los pensamientos y sentimientos se ordenen. 

La Fase de Cuarentena es una fase que ayuda a la transición de la zona de confort a la zona de aprendizaje, de la enfermedad a la salud, de la muerte a la vida, del estancamiento a la creatividad.
Es un periodo de tiempo en donde la persona se dedica a sí misma para así realizar cambios en SU propia vida, el objetivo es alejarse del “ambiente tóxico” donde vives, ese ambiente que alimenta tus creencias, que alimenta tu inconsciente y te crea una incoherencia interna para así sanar desde ti mismo sin tener que depender de los demás.

Pero, ¿De dónde viene esta “cuarentena”?
Es una práctica de salud en donde aislaban a la gente que tenía alguna enfermedad contagiosa, la palabra viene del italiano “quaranta” para referirse al lo que en algún momento dado creían que era el tiempo de aislamiento adecuado.
Para el inconsciente colectivo la cuarentena tiene un papel muy importante. vendría a ser un arquetipo, un conocimiento profundo de nuestra psique relacionado con problemas muy importantes que heredamos a través del inconsciente colectivo y que pasan de este al inconsciente familiar.
Al observar la historia hay varios periodos de cuarentena, (aquí mencionó algunos):
Los cuarenta años que Moises deambuló por el desierto para llegar a la tierra prometida
Los cuarenta días que Jesus estuvo en el desierto
Los cuarenta días que Jesus estuvo aquí en la tierra después de la resurrección, hasta la ascensión a los cielos
Los cuarenta días que duró el diluvio universal
La Cuaresma previa a la Pascua
Los cuarenta días de Moises y Elias en la montaña
Los cuatrocientos años que estuvo el pueblo de Israel sometido al faraón
En las escrituras del antiguo testamento había reglas para aislar a los leprosos

Veamos ahora a nivel biológico:
Los cuarenta días que una mujer necesita reposo para cuidar de sí misma y a su bebé después de un parto, para que el útero y su cuerpo se recupere y vuelva todo a tomar su lugar
Cuarenta días son los necesarios para recuperarse de una fractura
La gestación humana dura entre 38 y cuarenta y dos semanas
Cuando hay una epidemia se considera erradicada cuando pasan cuarenta días sin nuevos casos de infección

Veamos ahora a nivel psicológico:
En este tiempo es lo que toma a una persona para reflexionar y tomar conciencia de ciertos aspectos de su vida que de alguna forma se mantenían ocultos a su consciencia, algunos de ellos pueden ser sus miedos, recuerdos de experiencias incómodas, dramáticas, así como experiencias que nos llenaron de alegría en su momento, no todo es “malo” o negativo, estos momentos de reflexión lo tomamos para definir el “cómo”, ¿Cómo quiero vivir mi vida a partir de este momento?, a travez de la enfermedad o síntoma físico que me está mostrando mi cuerpo, ¿qué áreas de mi vida debo transformar para vivir una vida más libre, sin cargas y sobre todo con una paz interior y en coherencia conmigo mism@?

En estos momentos nos alejamos de la rutina diaria, de las responsabilidades que hemos adquirido, y se van liberando pensamientos estancados basados en creencias no sustentadas científicamente y es momento de transformarlas.
Es un renacer de ti mismo desde otro lugar, desde otra perspectiva sobre ti mismo. Aprovecha este tiempo para hacer actividades que te gustan y “nunca tienes tiempo” como leer, ir de pesca, acampar, convivir con la naturaleza, tejer, ir al cine, etc…
Recuerda tú eres quien elige cómo actuar ante cualquier circunstancia sin que importe “el que dirán”, TU eliges tu propio camino.

Recomendaciones para una fase de cuarentena óptima:

Rodéate sólo de personas neutras emocionalmente, con las que no tengas vínculo emocional. Porque cuando el subconsciente detecta al depredador, vuelven a saltar las alarmas de defensa del cuerpo.
Aléjate de todas aquellas situaciones o personas tóxicas emocionalmente para ti, de todo aquello que te etiquete, juzgue o condicione tu comportamiento negativamente.
La familia es muy tóxica en muchos casos porque se cree con derecho a decirte lo que tienes que hacer o porque dice saber lo que más te conviene. La intención positiva de la familia es protegerte, pero esto indica que están llenos de temores a que te suceda algo malo, te envían el mensaje subconsciente de “cuidado, estás en peligro”, por eso es tóxica. Pero, cálmate, el Universo te protege y quiere que te expandas y crezcas, igual que contribuye para que una planta florezca.
Las adicciones emocionales hacia otros castran y enferman. Puede suceder que me enganche a papá, mamá o a mi pareja para que me quieran como yo quiero o para que llenen mis vacíos internos. Sé consciente de que pasarás un estado parecido al síndrome de abstinencia, tendrás el deseo ferviente de comunicarte y retomar el contacto, de refugiarte en el otro. Trasciéndelo, ¡¡¡CONFÍA EN EL PROCESO!!! y tras la fase de cuarentena podrás experimentar hacia las personas un apego más sano y seguro, lleno de libertad y colaboración.
Convierte tus relaciones en una libre elección, no en una necesidad. Repite conmigo en voz alta….

“SÓLO HAY UN AMOR PARA SIEMPRE, EL AMOR PROPIO”

Todos los recursos que necesitas están en ti, ¡ACTÍVALOS!, deja de buscar fuera.
Escucha y atiende tu brújula interior, conecta con el sabio que llevas dentro. Oye consejos para obtener alternativas pero escucha a tu sabio interno, será el único que te guiará por el mejor camino hacia tu bienestar y plenitud.
Céntrate en hacer lo que verdaderamente sientas que es mejor para ti, lo que te hace sentir física y emocionalmente mejor, lo que alimente tu estado de salud, lo que te haga vibrar en tu más alta frecuencia. Trátate bien, mímate, date placeres, ámate.
El mejor indicador de dirección a tomar es tu cuerpo, aprende a interpretar sus mensajes. La ansiedad es miedo a tomar decisiones. Es el mismo estado emocional que se produce cuando estás en un trampolín antes saltar al vacío, cuando te estás planteando… ¿me tiro o no me tiro, me haré daño, y si sucede algo malo después? Desaparece cuando das el salto. Seguidamente te das cuenta de que el miedo no tenía fundamento, que es una invención de la mente disfuncional proyectando un futuro de fracaso.

“¡RÍETE DE TUS MIEDOS PORQUE SON MENTIRA!”

Es necesario que estés tranquilo/a, que no haya estrés. Las hormonas del estrés frenan el crecimiento celular del cuerpo y cierran todo aquello que usa energía, se apaga el Sistema inmunitario. Para la fase de reparación de la enfermedad necesitamos tu sistema inmunitario ¡A TOPE DE ENERGÍA!
Es momento de encontrar personas que te hagan ver las cosas de otra manera, que interpreten la vida con optimismo y desde la plena consciencia, que te sirvan de ejemplos para tomar nuevos rumbos, para adquirir nuevos hábitos.
No te dejes sucumbir por los saboteadores internos y/o externos. Cuando te plantees el cambio, experimentarás situaciones y aparecerán personas que te inviten dar pasos hacia atrás, a refugiarte de nuevo en lo que era conocido para ti. Son barreras que han sido construidas subconscientemente por tus miedos, son mentira, no te las creas. Simplemente reconócelas, conecta con tu guerrero interior. Vamos, ¡¡ARRIBA!!, sigue caminando hacia delante, demuestra a estas pruebas de fe que

¡TÚ PUEDES CON TODO LO QUE TE PROPONGAS!

Las personas enfermas se desvalorizan mucho y buscan agradar a los demás, nunca hacen lo que quieren, tal vez para cubrir la necesidad de atención y apoyo. Agradar a los demás implica que los consideras en un orden de prioridad e importancia mayor a ti, ¡te consideras inferior! Recuerda…

“¡TÚ ERES LA PERSONA MÁS IMPORTANTE DE TU VIDA!”

La cuarentena es como una muerte simbólica, no te comunicas con nadie externo, sólo estás contigo mismo. Solo así puedes conectar con esa voz interior que reclama nuevas formas de amarte, de honrar tu vida.
Es un espacio imprescindible de quietud mental para cambiar tu vida, para reajustar tus creencias, porque todo lo que has hecho hasta ahora te ha llevado al actual estado de enfermedad.
Tomar alimentos depurativos que faciliten la expulsión de líquidos (té, café, espárragos, alcachofas, piña, etc.) y toxinas. ¡¡Estás sudando enfermedad!!
Estar en contacto con la naturaleza largos períodos de tiempo, si tienes un lugar de retiro sería ideal. Los elementos Tierra, Aire, Agua y Fuego tienen la capacidad de limpiar tu cuerpo energético. Bañarte en el mar o en la bañera, tomar el sol, pasear por el monte te recargarán las pilas.
Un tiempo de Ayuno para que toda tu energía esté centrada en los procesos internos.
Respeta este periodo de reflexión, deja que la tormenta pase y cuando lo tengas claro… ¡ACTÚA! Toma decisiones en coherencia con lo que realmente sientes que quieres hacer, aunque de miedo dar el paso, hazlo.
Comparte tus decisiones con tu entorno y rodéate sólo de quien te respete.
No permitas que nadie te diga que no puedes, ¡TODO ES POSIBLE! La neuroplasticidad del cerebro permite hacer todo tipo de cambios en la estructura de pensamientos. Nuestra mente es ilimitada y tiene la capacidad de manifestar todo aquello que deseas.
Finalizada la fase de cuarentena, ya estás preparado para experimentar lo que algunos ya conocemos, LOS MILAGROS … ¡Que así sea!

(Extractos tomados del libro El arte de Desaprender, Enric Corbera)

Un comentario en "Cuarentena"

  • Gracias Mónica, ahora estoy en este conocerme, estar sola conmigo. Gracias por tu apoyo y ayuda.

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